La fibromialgia puede ser una enfermedad increíblemente solitaria. Incluso cuando se está rodeado de otras personas, por muy solidarias que sean, uno puede sentirse con la dificultad de explicar lo que a menudo conlleva la enfermedad. Es agotador que la gente te pregunte constantemente cómo estás y como te sientes. Sin embargo, cuando se está solo, un enfermo de fibromialgia puede sentir realmente la soledad que suele acompañar al dolor crónico.
Por esta razón, muchos consideran que tener un animal de compañía puede mejorar enormemente la calidad de vida cuando se lucha contra la fibromialgia. Aunque en un principio esto pueda parecer desalentador, hay muchos beneficios que pueden suponer un verdadero salvavidas para los enfermos.
Rutina
Una de las ventajas de tener una mascota es la nueva rutina. Ya sea darle de comer, bañarlo o sacarlo a pasear, todo animal (por grande o pequeño que sea) necesita cuidados. Al establecer una rutina para un animal, también la establecemos para nosotros mismos. A menudo, en los días de brotes, la fibromialgia puede limitar nuestra actividad. En los días sin rutina, la salud mental puede verse afectada, haciéndonos sentir lentos y tristes. Como está bien documentado, se ha demostrado que el estrés y la ansiedad influyen en los síntomas de la fibromialgia. Tener una razón y un momento para levantarse y estar activo cada día puede hacer maravillas en este sentido. Una mascota puede dominar tu rutina, en lugar de la fibromialgia.
Estado de ánimo
Además de los evidentes cambios de humor que se producen de forma natural con un régimen recién implantado, hay más estudios que demuestran que la presencia de animales puede liberar endorfinas. Interactuar con animales hace que el cuerpo libere de forma natural estos péptidos «felices», que alivian el estrés y el dolor. Además, la mascota puede distraer la atención de las preocupaciones internas sobre el propio estado. La presencia de un animal, necesitado de cariño y atención, puede desviar la atención del propio dolor.
Ejercicio
Uno de los tratamientos más comunes que se dicen a quienes padecen fibromialgia es el ejercicio ligero. Esto suele parecer una gran contradicción: cuando te duele algo, lo último que se te ocurre hacer es salir a pasear. Sin embargo, si tienes un perro o un cachorro, la elección se te escapa de las manos. La rutina habitual de tener que pasear a tu mascota te anima a salir de casa y moverte. Se ha demostrado que pasear cada día reduce el dolor crónico. Convertirse en dueño de una mascota mejora no sólo nuestro bienestar mental, sino también el físico.
Compañía
Tener un animal cercano en casa disminuye la soledad. Muchos de nuestros lectores afirman que el sufrimiento que padecen a diario debido a su diagnóstico les hace sentirse aislados y desconectados, incluso de quienes mejor les conocen. Una mascota cariñosa y atenta puede proporcionar consuelo y comodidad, sin necesidad de dar explicaciones de por qué se siente usted callado o desorientado.
Algunas cosas a tener en cuenta
Aunque sin duda tener un animal de compañía tiene muchas ventajas cuando se padece fibromialgia, hay aspectos específicos que deben tenerse en cuenta a la hora de dar el paso.
Tiempo
Por encantador que pueda parecer tener un nuevo animal de compañía, si eres un padre muy ocupado o trabajas a jornada completa en un empleo exigente, puede que no sea para ti. Los animales de compañía mejoran nuestra calidad de vida, siempre que no supongan una carga adicional de estrés. Si cambiar la caja de arena del gato o sacar a pasear al perro le parece demasiado para añadir a su rutina, quizá no sea la mejor idea tener un animal de compañía. El estrés empeora los síntomas y le hace sentirse resentido, en lugar de alegre. También hay que tener en cuenta que los gatos requieren mucho menos tiempo al día que los perros.
Raza
Este es un factor especialmente importante que hay que tener en cuenta. Probablemente no sea aconsejable que un enfermo de fibromialgia tenga un perro muy exigente y activo. Aunque sean bonitos, hay razas que exigen mucho tiempo de atención y cuidados. En su lugar, hay que buscar razas que necesiten menos paseos diarios y sean felices con menos estímulos.
Edad
Puede ser aconsejable comprar o adoptar una mascota que ya haya alcanzado la madurez. Los cachorros y los gatitos, aunque adorables, son un trabajo duro. Para muchas personas que padecen fibromialgia, la idea de adiestrar a un perro nuevo puede ser demasiado. Incluso es posible encontrar ex perros guardianes o de rescate totalmente adiestrados. Si sigues este camino, estarás ayudando tanto al perro como a ti mismo.
Aunque la tenencia de un animal de compañía plantea algunos retos, hay muchas razones por las que, como persona que padece fibromialgia, es algo a tener en cuenta.